sábado, 3 de octubre de 2009

...El Sida: una cruel penitencia...


El SIDA es una enfermedad que afecta gradualmente las funciones de determinadas células del sistema inmune. Con el tiempo, se fue instalando mundialmente y cada vez son más las victimas que arrastra en su camino.
Lamentablemente, los niños no son excluidos de esta problemática. Actualmente, se estima que cerca de 3 millones de niños menores de 15 años poseen dicha enfermedad. A causa de esto, los menores infestados son más idóneos a poseer defensas bajas y por ende, a contraer distintas infecciones que pueden poner en riesgo su vida.
Aproximadamente, el 90 % de los casos lo adquiere a partir de la transmisión madre-hijo (TMI). Este virus puede ser transmitido durante el embarazo y por medio de la lactancia materna. Si bien esta última es mínima (de un 15 %) ayuda a prevenir un tercio de las infecciones del VIH.
En los países del tercer mundo, los niños infectados por el Sida,se les suministra un tratamiento específico, aislado y ambulante para que no contraigan cualquier virus que se encuentran en el ambiente.
Sin embargo, la suerte no es la misma para todos. Aun no existe una vacuna y los tratamientos son muy caros. En los países de bajo recurso los niños mueren a causa de esto y a veces no tienen la posibilidad de acceder a los medicamentos o a un tratamiento adecuado bajo las condiciones de higiene.
El 1 de diciembre se conmemora el “Día Internacional de la Lucha Contra el Sida”. Desde hace años que se viene llevando a cabo una batalla para poder combatir esta enfermedad que le quita la esperanza a muchos niños. Ojala el día de mañana se obtenga la vacuna contra el HIV y que todos los niños puedan poseer un tratamiento sanitario y coherente que les permita mantener una vida “normal”.









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